No creo que en este caso se recupere la maleta que se extravió en Medellín, pues a pesar de ser de pronto más pequeña que Bogotá no todos cuentan con mi suerte. Aparte de que está sé se la llevaron con la intención de robársela, lo que no sabe el ladrón es que se pegó de casi nada, pues no creo que la ropita que había allí le quede.

Así que a viajar ligero de equipaje, una preocupación menos y una experiencia más y como los errores se paga con dinero, pues que sea un buen motivo para renovar el vestuario y para próximas ocasiones saber que si se va acompañado, hay que actuar como tal, no cada quien como volador sin palo.
Lo único rescatable de esta pérdida es que al menos no llevaba cosas de valor, pues ropa, se consigue, pero los documentos si es un camello recuperarlos.