Hoy que fuimos al estadio se nos acercó una amiga a saludarnos y se fue conversando con nosotras. Ella anda rápido, al estilo militar, es muy chistosa, tiene buena conversación y charla tan rápido como camina y entonces nosotros para no perdernos de lo que decía nos tocaba ir al paso de ella. Casi al trote.
Fue muy divertido pues tenía mas de una historia para contar y eso pasaba de una cosa a otra sin mucha dilación y nosotras tratando de llevarle el paso. Creo que nos contó su vida, obra y milagros, desde la niñez hasta el momento. Le pasaron muchas cosas, me imagino que solo nos contó las agradables, de las que se acordaba, que la hicieron feliz.
Y al trote también hablamos de sexo
Entre otras cositas que contó salió a relucir el sexo. No podía faltar, y con su chispa contó varias anécdotas, entre ellas el de una pareja que le tocó ir al médico porque se les quedó un pepino dentro del cuerpo. Si hubiera sido a la mujer pues vaya y venga pero lo chistoso es que fue al señor al que se le quedó, o sea que les gustaba jugar pesadito.
Otro donde una pareja se quedó pegados como los perro y tuvieron que separarlos, pero es que contaba estas anécdotas con tanta gracia, que todo la caminada fue muy divertida y la sudada también. Al otro día aún nos dolía todo. Ahí nos dimos cuenta que andamos a paso de tortuga.
Ya tratamos de caminar más rápido, pero sin el motor que nos empuje no es lo mismo y no es por falta de cháchara pues cuentos siempre tenemos para echar, pero con alguien que nos lleve al trote es mucho mejor.
La profe ya madruga a caminar
La profe también empezó a caminar en estos días para hacerle terapia a su pata chueca. La acompañamos pero nos toca dejarla sola por que ahí el paso es de tortuga… más de lo normal, pero aunque ahora tiene la excusa de que le duele su pierna, ella siempre camina despacio.
Sin embargo, seguro siente que le sirve estas caminatas para la circulación, que es al fin para lo que nos sirve a los viejitos que vamos allí. Porque si de verdad queremos bajar de peso, toca es cerrar el pico porque a punta de caminadas no es suficiente.
Si la profe caminara con nosotras iría al trote, así como nos llevó esta amiga, pero seguro si continúa juiciosa muy pronto nos llevará el ritmo de su parlamento, por que no le sobra de que hablar y ahora que ya anda de vaga, pues más todavía.
